Siempre en la primera
vez, tenemos sentimientos que sólo se pueden experimentar en ese momento, sensaciones que jamás
volverán a repetirse.
Así me siento yo, como
mi primera vez, esa mezcla de emoción, alegría, nervios, inquietud, excitación,
pero a la vez con muchas ganas de hacerlo.
Recuerdo ahora y tal
vez tú también estarás pensando en tu primera vez, cuando la incertidumbre del
no saber hiciera que mis manos sudorosas resbalaran al tocarte, mi voz se entrecortara y aunque mi
cara quisiera demostrar tranquilidad, mi
corazón estaba a punto de de escaparse de dentro de su caja. ¿Cómo sería? ¿Lo haría bien? ¿Cómo sería el
resultado?
En las fotos que
ahora os muestro, no era mi primer contacto con una modelo, pero la diferencia
que había con las otras veces era que iba a estar desnuda.
La experiencia resultó agradable, el clima invitaba a relajarse
y pude empezar a disfrutar. Aunque los
resultados no fueron del todo lo que esperaba, también debido a mi fuerte dosis
de perfeccionismo. Fue rápido. Ya había pasado. La verdad es que me quedé con
ganas de más, esta experiencia quería volverla a repetir, fue divertida y
excitante ¡¡¡¡Quería más!!!!
Por eso decidí en ese momento que el desnudo se convertiría en una parte
importante de mi estilo fotográfico. Después
del paso del tiempo, del esfuerzo y las ganas por mejorar
la técnica, hoy os quiero mostrar uno de los últimos desnudos realizados. Sencillez, gusto y fuerza son los elementos unidos para ser captados por mi objetivo y poder
mostrároslo a todos vosotros.
Espero que os gusten.
www.edgfotografia.com info@edgfotografia Nomar marco & Raul Morell
